Guía Básica para trabajar los Acer buergerianum:
Los Arce buergerianum o Arce tridente (también conocido en Japón como kaede) es una de las especies que menos problemas da a la hora de formarlos como bonsáis. Con un pinzado y un trasplante (cuando son jóvenes) al año irán fenomenal.
Yo los suelo reproducir mediante semillas o esquejes de las podas que realizo durante el año.
Existen variedades de buergerianum, de las cuales prefiero la de hoja pequeña, miyasama yatsubusa, que tienen entrenudos cortos y quedan mejor para bonsáis pequeños (mame y shohin).
Los arces de hoja más grande tienen características más rotundas y sirven para hacer árboles de mayor tamaño, aunque puedes conseguir reducir su hoja con pinzados.
Arce Buergeriano en Otoño
Con los arces buergerianum tenemos muchas diferencias, incluso dentro de una misma variedad, cambian de forma y características.
Por tanto, tienes que tener claro las características para formar uno u otro tipo de bonsái.
Si tienes un árbol con hojas pequeñas y los entrenudos cortos, lo mejor es formar bonsáis compactos, pequeños y más dulces.
Pero si tenéis hojas más grandes con entrenudos largos, es lógico ir a por bonsáis con más fuerza y de mayor tamaño (aunque sea poco popular hoy día según las modas).
Agua y Riego
- No tiene el problema del arce palmatum y admite cualquier tipo de agua, eso sí le gusta en más cantidad.
- Si puedes debes regar con agua de ósmosis si vives en una zona con agua dura como yo.
- El agua del grifo, si no es muy dura no suele dar problemas, así que no te vuelvas loco.
- El Riego como siempre debe ser abundante, no dejes secar el sustrato nunca, cuando veas que empieza a secarse la superficie lo riegas.
Si lo que quieres es trabajar para obtener ya un pequeño bonsái o trabajar un bonsái ya grande y mantenerlo, evitando entrenudos cortos, riega de forma abundante (siempre pensando en tu clima y el calor que tengas). Observa la superficie de la tierra y espera a que se seque, después riega de nuevo.
El buergerianum es una especie muy fuerte, de crecimiento rápido y necesita por tanto ser bien regado. La manera de controlar su crecimiento será trasplantándolo cada dos años como máximo y pinzando varias veces al año (incluso defoliando algunas veces).
Sobre todo en primavera es importante, cuando la fase de desarrollo es fuerte y las ramas se disparan.
- Remoja las hojas en verano, por la mañana y por la tarde, aunque corras el riesgo de que los hongos afecten un poco las hojas, es mejor pasarse en verano y que el árbol se encuentre fresco sin que se marchite.
- A veces, para evitar estar regando todo el tiempo, yo le pongo un 10% de turba negra o mantillo. Así espacio más los riegos.
- Si tienes árboles en macetas muy pequeñas, ponlos en una bandeja con agua, que no toque el fondo, para no pudrir las raíces (puedes poner piedras de 1 a 2 cms en el fondo), se crea un ambiente más húmedo de seguridad. Esto sirve también para cuando te marches de casa o si vuelves tarde del trabajo. En verano es fundamental.
- Si no puedes regar con una regadera especial con agujeros finos, para que no se caiga el sustrato, puedes comprar unas boquillas en cualquier vivero o tienda para adaptar a la manguera. También puedes sumergir la maceta en agua hasta que saque todo el aire, después la sacas y dejas que salga el agua.
- Lo importante es asegurarse que todo el interior de la maceta se humedece y renueva el aire, recuerda que las raíces respiran.
Riego con lanza gardena.
Sustrato
- En el mundo del bonsái cada vez utilizamos más sustratos como los japoneses, que absorben agua y mantienen la porosidad (huecos con aire para que respiren las raíces) sin causarles daño por exceso de humedad, encharcamiento o ahogo de las raíces, que es fatal.
- En el punto de trasplantes te digo lo que debes poner como sustrato al arce buergerianum.
- Akadama, es una arcilla cocida que utilizan los japoneses para sus bonsáis, es más cara, pero tiene muchas cosas buenas, como sustrato es de los mejores. Lo que no aporta es alimento y con las heladas a los 2 ó 3 años se debe volver a trasplantar. De todas formas si tienes un árbol joven no importa porque lo trasplantarás cada año o cada dos.
Yo utilizo sustrato volcánico japonés: 3 partes de Akadama y 1 parte de Kanuma.
Ubicación
- ¿Qué puedes ofrecer a tu bonsái?
- ¿Vas a poder ubicarlo en el exterior o será imposible?
- Todos los árboles necesitan estar al aire libre, en exterior, incluso los que sean de otro clima (lo único es que tendrás que tener cuidado cuando llegue el frío y protegerlo adecuadamente).
- Nuestro Acer buergerianum es un árbol muy fuerte, sin tantas exigencias como el arce palmatum.
- En primavera y otoño a pleno sol sin dudarlo. Hasta cierto punto podemos tener quemadura en las hojas, hay que sopesar dependiendo mucho de tu clima.
- En verano sombréalo con malla de sombreo del 50%, si no tienes o no puedes conseguir, evita que le dé el sol directo fuerte.
- En invierno aguanta bien las heladas, pero mejor protegerlo con plástico cuando lleguen las temperaturas a -3 grados o por debajo. Las raíces sufren y pueden congelarse. Lo peor son heladas seguidas, impidiendo que se descongele la maceta. Riega solo cuando se haya descongelado la maceta.
- En caso de que no se descongelen durante varios días, es mejor regar y humedecer el sustrato a que éste se seque. Las heladas y el clima seco de invierno, reseca muy mucho. Debemos sopesar. Aunque esté todo helado, será preferible regar.
- Cuidado con las macetas muy pequeñas, tanto en verano como en invierno, se secan muy rápido y se hielan muy rápido. Se deben proteger sí o sí.
- No lo protejas dentro de un invernadero, porque el acer buergerianum necesita sentir el frío, si no puede brotar antes de tiempo y eso lo debilitaría. Protégelo cuando caigan mucho las temperaturas durante varios días seguidos o en olas de frío.
- En sombra total los colores se desvanecen mucho, a pleno sol (siempre cuidando de los riesgos que te he dicho), la coloración de los arces es espectacular.
En éste artículo hablo sobre la ubicación de tu bonsái.
Trabajos
Los cuidados básicos del hacer buergerianum son el trasplante anual y el pinzado contínuos.
· Trasplante
Los árboles jóvenes se deben trasplantar cada año, es lo mejor, incluso árboles de más edad, quizás los árboles viejos ya muy establecidos cada 3 ó 5 años.
Este debe hacerse antes de que empiecen a hincharse las hojas, no como en el resto de árboles. Esto es porque tiene raíces muy gruesas y necesita unos días para reponerse del corte de raíces, ya que pierde fuerza de succión de agua por sus raíces finas (que suelen ser muy gruesas).
Le cuesta mucho más reponerse del corte de raíces que al resto de especies.
Por tanto, no cuando hinchen yemas, ANTES.
Puedes hacer trasplantes de urgencia, pero evita el viento y el excesivo calor. Lo mejor es hacerlo un día lluvioso o nublado, protegido del viento.
Cuando trasplantes debes sanear las raíces que veas podridas, de color negro o marrón oscuro. También hay que podar las ramas que no sean buenas para el diseño para reducir la masa aérea o copa. Si quitas muchas raíces debes también reducir ramas en la misma proporción que las raíces que has cortado.
Si tienes dudas sobre cuanto cortar o cuanto dejar, lo mejor es dejar 1/3 más de raíces que de ramas, o si no te decides es mejor no podar raíces y preguntar para la próxima vez a un experto o aficionado, nunca en tiendas no profesionales (muchas veces donde lo compras no tienen ni idea).
Humedece las raíces durante el trasplante para evitar que se sequen.
Coloca un montículo donde vayas a ponerlo y aprieta haciendo giros con el árbol, para evitar que debajo quede aire que pudra las raíces.
Es muy importante que inmovilices el árbol, puedes hacerlo de muchas maneras, con cuerda de cáñamo.
Cuando termines el trasplante es bueno poner encima musgo sphagnum, que evitará que se seque demasiado los días calurosos de verano y que las hojas se quemen.
Como sustrato échale akadama en un 75%, kanuma en un 25%. Si no tienes kanuma pon hasta un 15% de mantillo o turba negra bien mezclada.
El sustrato siempre bien tamizado, desechando los tamaños menores a 2mm.
Si no tenéis akadama ni kanuma, una mezcla buena puede ser:
- Arena gruesa o gravilla fina (que sea de grano superior a 2mm) un 40%, puedes sustituirlo por granos de tierra volcánica o similar.
- Mantillo o mezcla preparada para bonsái en tiendas especializadas, llevan fibra de coco, perlita, mantillo, turba, arena…de esta mezcla le echas un 60%.
Lo importante es que la mezcla tenga un buen drenaje (desagüe), que el agua no se estanque, que salga rápido por los agujeros de drenaje de la maceta. También es importante que sustrato no se deshaga, mantenga la humedad y el aire.
Recuerda que el mantillo o la mezcla preparada comercial para bonsái no es lo ideal, sólo te la recomiendo si no encuentras otra cosa. Y sobre todo no para una maceta de bonsái.
Muy importante es el post-trasplante, situando el árbol en zona sombreada e iluminada, pero fuera de los rayos de sol directo y protegido del viento, al menos hasta que empiece a brotar bien.
En dos o tres semanas empezará a brotar, si no espera y no te pongas nervioso, a veces cada árbol tiene sus peculiaridades.
Sobre la elección de maceta, si quieres que tu Arce empiece a desarrollar las raíces, encaminadas a un nebari bonito y a que no desarrolle en exceso un vigor que haga que se disparen las ramas, es importante que pongas macetas no muy profundas (a no ser que quieras que engorde y se desarrolle mucho hasta que empieces a trabajarlo para hacerlo bonsái). Por tanto, suelen ser buenas las macetas poco profundas o bajas y ovaladas.
Mira éste artículo donde hablo de trasplantes.
· Poda y pinzado
El Pinzado se hace varias veces según vayan alargándose las ramas ya que tiene gran fortaleza (no como el arce palmatum), si abonamos en exceso seguirán creciendo con fuerza sin parar.
Si salen más brotes es que los estamos abonando mucho (solo si son jóvenes y queremos que crezcan mucho lo haremos).
Si es un árbol tiene años y ya está formado (más estable), tendrás que controlar tanto el riego como el abono, para evitar los entrenudos largos.
La mayoría de los autores dicen que la poda se realiza en otoño, cuando tira la hoja, tan sólo ramas finas muy largas como te digo en éste vídeo.
El Pinzado suele hacerse cuando veas que los brotes en primavera se desarrollan y paran, es entonces cuando es mejor pinzar, dejando un solo brote corto de las ramas nuevas, de los que tienen hojas en la base de la rama y cortando donde se empiezan a alargar los entrenudos.
Si el primer entrenudo es algo largo, córtalo sin pensarlo, de ésta forma aceleramos la brotación. Igual que hacemos con el arce palmatum.
Este pinzado suele hacerse durante la primavera, no antes de que maduren para que la fuerza se distribuya bien.
Como verás el arce buergerianum no brota como el palmatum, sigue durante toda la temporada sacando brotes que tendrás que pinzar como te he contado. Incluso hasta entrado el otoño (si el frío llega tarde), el árbol seguirá alargando ramas.
Conforme sigan creciendo tendrás que pinzar cuando estos paren un poco (maduren).
Las yemas de los futuros brotes se van abriendo de dos en dos, en forma de V, así tendremos un par de yemas que son las que salen hacia arriba y hacia abajo, corta desde la base el que sale inferior y deja el superior.
También quita todos los chupones o brotes en la base del tronco o ramas, que le restan fuerza al árbol.
Cuando un bonsái está ya formado, para mantener la forma de éste, también puedes pinzar tan pronto como crezcan los brotes de ramas no deseadas.
El maestro Murata Isamu, suele trabajar sus bonsáis con las podas y pinzados, de manera que deja crecer las ramas y poda según la dirección deseada, ya que los brotes son opuestos y dobles, debes ver la dirección hacia dónde quieres que se dirija la nueva rama, dando forma helicoidal a las ramas y eliminando los brotes no deseados.
Es básico el pinzado, sobre todo en la punta de las ramas y ápice, para evitar que brote solo por éstas zonas y brote en zonas interiores.
Aunque también existe otro tipo de pinzado, que es el que aplico más después de haber comprobado su efectividad.
En éste vídeo te explico cómo hacer el pinzado del buergerianum según sean la fuerza de sus brotes. Hay que hacerlo en primavera, en cuanto veas los brotes fuerte cómo alargan.
Para evitar que las hojas sean más grandes, debes exponer los arces a zona muy luminosa e incluso a pleno sol, cuidando eso sí, las épocas de verano y sol fuerte, de esa manera obtendrás mejores hojas, fuertes y en otoño un color precioso.
Recuerda que no debes podar un árbol que veas débil, con hojas marchitas o de mal aspecto. Solo poda árboles que estén fuertes y sanos.
Defoliado
La defoliación se puede realizar, pero parcialmente. Sólo quita las hojas de las partes que veas más fuertes.
Brotará muy pronto nuevas hojas con mucha fuerza.
Ésta defoliación puedes hacerla durante el segundo pinzado, a finales de primavera, antes de que llegue el fuerte calor.
· Acodo
El acodo es quizás la mejor manera de conseguir rápidamente un bonsái de pequeño tamaño.
Esta técnica del acodo se realiza cuando los árboles tienen más fuerza, a mediados de primavera o finales. No podes ramas porque son las que harán que crezca más rápido las raíces en el acodo.
El acodo es retirar una banda de corteza (anillo de ancho igual o superior al grosor del tronco del árbol) alrededor del tronco, por la zona donde queremos que las raíces salgan.
En éste vídeo te enseño cómo se hace en un manzano everest.
Siempre evita la deshidratación, regándolo (si dejamos una abertura por arriba) o inyectando agua con una jeringuilla si lo has cubierto completamente con plástico.
Las raíces aparecerán en la zona donde pelamos la corteza en dos o tres meses.
El momento crítico viene cuando retiramos la bolsa y vemos cómo ha ido el acodo, ya que no debemos quedarnos cortos ni pasarnos de tiempo.
Si hay pocas raíces mal porque la planta puede morir ya que todavía no tiene suficientes raíces. Si hay muchas raíces formando un bloque también mal, porque las raíces jóvenes del arce son muy quebradizas y desenredarlas sería difícil sin romperlas.
Por tanto, miras de alguna manera para intentar calibrar si hay o no suficientes raíces antes de retirar el acodo.
· Retirar el Acodo
Para retirar el acodo tendrás que cortar la rama o tronco, con cuidado siempre sin dañar las raicillas nuevas de la zona del acodo.
En el siguiente vídeo tienes diferentes variedades de acer palmatum donde retiro el acodo.
Una vez retirado, cortamos el sobrante de rama o tronco hasta la zona de raíces nuevas.
Al plantarlo en una maceta debes tener cuidado con las raíces, aunque éstas son más gruesas y fuertes que las del hacer palmatum (quebradizas y finas).
Debes sujetar y fijar muy bien, atando el tronco con cordel, fuertemente a la maceta, impidiendo que se mueva en unos meses para que las raíces crezcan sin romperse por causas del viento, lluvia, etc…
Cuida tu árbol de forma normal como a cualquier otro, regando, sombreando, abonando, etc…
Semillas
Las semillas son otra manera muy buena de conseguir plantas de una forma muy barata y gratificante, ya que ver crecer desde semilla para mí es de lo mejor de éste arte. Puedes conseguirlas por internet o en algún parque o vivero.
Tendrás que estratificarlas, es decir, si no vives en una zona con frío donde bajen las temperaturas por debajo de 5ºC en invierno, tendrás que mantener las semillas en la zona baja del frigorífico, en un pequeño tupper donde conserve la humedad y el frío, que no estén encharcadas (que no se vean las gotitas de agua).
Puedes guardarlas con arena fina o con perlita que puedes conseguir en vivero o centros de jardinería, tienen buenas características para guardar la humedad.
En el siguiente vídeo te doy algún consejo y te hablo sobre éste tema.
Además deberás de echarle fungicida cada mes y controlar que estén bien y que no germinan.
Si empiezan a germinar tendrás que plantarlas en una maceta o semillero (protegido de las heladas hasta que llegue la primavera, suelen aguantar bien las inclemencias del tiempo), puedes poner de sustrato akadama o en si lo prefieres 50% arena mezclada con turba rubia y negra.
Protégelas de babosas, caracoles y pájaros, con una malla y con antilimacos (granos verdes que se venden en centros de jardinería), sino corres el riesgo de quedarte en una sola noche sin ellos, después de todo el trabajo.
Mantén la humedad, pero no encharques. Aun así deberás de seguir cuidando los plantones de los hongos que atacan, cada 3 semanas o 1 mes sigue echándole fungicida.
El tema de las semillas merece un documento por sí solo, cuidados, etc…
Esquejes
Se hacen en primavera, con ramas de unos 10 a 15 cm.
Además te aconsejo éste artículo para que no tengas errores al realizar esquejes y tengas más éxito.
Aguantan bien al exterior, pero protegelos del viento y del sol excesivo, hasta que empiecen a enraizar ya avanzada la primavera. Después habrá que sobrearlos del intenso calor del verano.
También puedes esquejar a principios de verano funcionan bien y aguantan, pero no los saques hasta la primavera siguiente(debes protegerlos del frío y de heladas directas, aunque sea debajo de otros árboles o debajo de aleros).
Los esquejes en el arce buergerianum suelen dar raíces fuertes que hacen que el árbol prospere muy bien.
Abonado
Según quieras trabajar tu árbol debes de abonar:
- Si quieres que tu árbol engorde y crezca mucho, porque es joven, entonces tendrás que abonar para ese fin.
Debes usar abonos cargados en N (nitrógeno) y menos cargados en P (fosforo) y K (potasio).
- Si el árbol está ya trabajado o tiene una edad de 15 a 20 años o más, entonces debes abonar con cuidado y controlar mejor las dosis para evitar que el bonsái se dispare en crecimiento y estropee todo el trabajo.
Para un bonsái trabajado o que queremos que no crezca demasiado tendremos cuidado y si vemos que tiene las hojas muy verdes y brota sin parar, sin secar ninguna ramita, es que estamos abonando demasiado.
Tendremos que fijarnos bien en primavera y reducir o aumentar la cantidad de abono. Si ves que brota sin parar aunque hagas pinzados, es que estas abonando mucho. Por el contrario, el árbol brota muy lentamente, es que no está siendo abonado lo suficiente.
Es importante dejarlo a pleno sol (exceptuando el verano, no lo olvides) para que las hojas tengan menor tamaño y mejor color, dando bonitos colores en el otoño.
También debes cambiar el abonado, con más cantidad de P y K que de N, de esta manera mejora su fructificación y fortaleces el árbol, frenando su crecimiento con ramas de entrenudos cortos en vez de largos.
En primavera abona a finales de abril, para que el árbol no se dispare en crecimiento (a no ser que tu deseo sea el contrario, que crezca y engorde). Se suele abonar bien hasta el verano, que según las regiones y el calor, el árbol hace un parón en el crecimiento, por tanto, no hace falta abonar.
En otoño es cuando el árbol guarda fuerzas para pasar mejor el invierno. Se debe abonar siempre con abonos ricos en P y K, con menos N. El árbol suele engordar más que nunca, por eso no es buena idea tenerlos alambrados.
Y no olvides que un árbol recién trasplantado no debe ser abonado hasta que veas que brota. Después puedes abonarlo con tranquilidad.
En éste artículo te hablo y aconsejo sobre qué abonos puedes utilizar.
Protección contra enfermedades y plagas
El arce suele ser una especie fuerte, se adapta bien y tiene pocas plagas que le ataquen.
Los más normales suelen ser los pulgones, cuando las hojas están tiernas y en los brotes nuevos, en primavera hay que vigilar para que no los dañen.
Van acompañados de hormigas que se alimentan del azúcar que los pulgones eliminan, así que si ves hormigas en tu bonsái hay pulgones.
Pero suelen centrarse en los brotes tiernos, cuando el árbol crece y las hojas maduran los pulgones tienden a desaparecer.
Las cochinillas dañan más que los pulgones y pueden llegar a matar el árbol, pero lo mejor es utilizar polisulfuro de cal diluido en invierno, cuando se lo apliques al resto de tus bonsáis.
A pesar de todo el arce buergerianum es sensible a los hongos, debe de combatirse con un fungicida. Las hojas que estén marchitas o con hongos es mejor quitarlas para no extender las esporas por el resto del árbol o sus vecinos.
Los hongos en las raíces son mucho más peligrosos y es una de las formas en las que un arce buergerianum puede morir si no se ataja rápido el problema, aunque suele ser difícil verlo y a veces es demasiado tarde.
La peor enfermedad que ataca a los arces buergerianum es el verticillum, cuya solución no es sencilla. Se debe aplicar varios fungicidas en diferentes fases e ir cambiando para conseguir erradicar el hongos u hongos asociados. Actualmente sólo si consigues éstas sustancias (algunas de ellas prohibidas como el Beltanol), ahora en Europa necesitas el carnet fitosanitario, podrás conseguir salvar tu arce.
El ácaro de las agallas en las hojas, es microcópico y provoca granos amarillos o rojos como abultamientos en las hojas, no es perjudicial solo se debe eliminar las hojas.
El amarilleamiento de las hojas se puede deber a la falta de riego, se secan o marchitan y caen.
Lo mejor es utilizar sistémicos y tratamientos ecológicos que se aplican sobre el suelo para que lleguen por las raíces a las hojas. A no ser que persista la plaga o enfermedad y tengas que utilizar químicos específicos para dicho mal, es mejor no utilizar los químicos.
Las cochinillas pueden llegar a matar al árbol, pero lo mejor es utilizar polisulfuro de cal diluido en invierno, cuando se lo apliques al resto de tus bonsáis.
Variedades:
Voy a decirte las variedades de ésta especie, donde todos, son buenos para hacer bonsai:
- Arakawa kaede: una corteza rugosa, pero menos atractivo que el Acer palmatum Arakawa.
- Goshiki kaede: color de hojas rosa crema verde muy apretado, con 3 a 4 m de altura., también muy común y extendido.
- Hana chiru sato: hojas de color desvaído de verde claro casi blanquecino, rosado a rojo.
- Hime kaede: El más abundante y conocido, para hacer bonsáis de mayor tamaño, con hojas de color bronce a rojo, con una altura hasta los l0 m.
- Hime Toyo Nishiki: color de hoja tricolor (verde, crema y rosa thyrien) en primavera, convirtiéndose de naranja en otoño. Es muy raro.
- Joroku akame: con brotes de color púrpura con 2 a 3 metros de altura.
- Kifu Nishiki: hojas color verde oscuro a crema muy apretadas, redondeadas y preciosas. Árboles de pequeño tamaño, 1 a 1,5 m.
- Koshi Miyasama: hojas color verde oscuro, de forma redondo ovalada.
- Kyuden: gruesas hojas de color verde brillante.
- Miyadono: hojas color verde oscuro rojo / amarillo en el otoño. Produción grande de samaras.
- Naruto: gris hojas color verde
- Mino Yatsubusa: en primavera es castaño, follaje verde oscuro brillante, de color naranja rojizo en otoño, un desarrollo débil.
- A Mitsuba kaede: hojas color verde brillante, llegando a 7/8 m.
- Miyasama (Taiwan kaede): hojas de color verde brillante en la primavera, hermoso color rojo carmesí en otoño, produce fácilmente Samaras.
- Miyasama Yatsubusa: hojas de color verde, marrón y rojo, son amarillas en otoño. Ésta es la variedad que más me gusta en bonsái. De hoja delicada y pequeña. Era cultivada por el Principe Fusimi-no-miya lo cultivaba con cariño (Miyasama)
- Naruto: color de corteza gris hojas verdes en cogollos, las hojas se retuercen como si estuviesen deshidratadas.
Nishiki kaede: color de hojas al brotar rojos, corteza de corcho. - Nusatori yama: color de hojas rosa anaranjado en la primavera. Se desarrolla con dificultad debido a que no tiene casi clorofila y requiere muchos cuidados para equilibrar el desarrollo del injerto.
- Shirley debaqc: color de hojas verde oscuro.
- Subintegrum: color de hojas verde brillante llegar a 15 m.
- Tacho: hojas color de hojas bronceado hoja verde 2 m de altura.
- Wakoh Nishiki: hojas blanco rosáceo en primavera, frágil por su casi total ausencia de clorofila, es muy amado por los coleccionistas.